Joven cuarteto procedente de Gijón que firman un pop-rock dulce, carne de radio fórmula. Unos temas con alto protagonismo de las seis cuerdas con rasgos americanos y unas letras bien trabajadas. Canciones llenas de melodías y estribillos pegadizos que traen a la memoria a una amalgama de artistas que varían desde M-Clan o Quique González hasta Dylan.

Fru Katinka llegan de Valencia a pesar del nombre, en formato dúo y formados el pasado año 2017. Presentan una propuesta en la que mezclan una gran variedad de estilos contemporáneos que van desde el pop hasta el techno confluyendo en un mismo tema variantes clásicos con la vanguardia. Bjork, autotune y Hip Hop en lo que será sin duda una de las apuestas más curiosas y  experimentales de la edición.

Banda de reciente creación, en formato cuarteto y llegados desde Vitoria Gasteiz. Lo de estos chicos es un posthardcore con rabia, en el que aprovechan para contar historias y denunciar el componente más oscuro de la naturaleza humana. Euskadi siempre ha sido buena escuela para este tipo de sonidos (Dut, Lisabö…), por lo que es buena noticia ver que alguien continúa este legado. Sobre las tablas de Bilborock se estrenarán en la capital bizkaina en lo que promete ser un show con altas dosis de cabeceo.

La nota instrumental y atmosférica la pondrán este año los donostiarras Hyedra. Curtidos en mil batallas dentro del llamado Post Rock y el underground en general y con un maravilloso nuevo álbum bajo el brazo, con lo mejor de los sonidos paisajísticos, el joven quinteto defenderá la ardua tarea de mostrarse sin cantante y estamos convencidos de que superarán el reto con éxito.

Las voces no son necesarias en la propuesta del dúo bilbaíno Killerkume. Sin miedo a equivocarnos, el show más arriesgado de la categoría, por lo complejo e inexacto de sus largas composiciones que no bajan de los diez minutos. Ruido anárquico pero a la vez perfectamente orquestado entre batería y una guitarra que suena a cualquier cosa menos a lo que el oyente medio está acostumbrado.

Sonido gamberro y salvaje el de estos jovencísimos vigueses que a pesar de la edad llevan un amplio recorrido en su carrera. Sus canciones parecen firmadas en playas californianas, no obstante su actitud y sus miembros lo definen como un sopapo en la cara. Encerrarles en una etiqueta sería injusto, pero se declaran seguidores de gente como Fidlar o The Orwells, lo cual debería dar una idea de lo que se puede esperar de ellos.

Las calles londinenses vieron el surgimiento de Lady Banana, un power dúo femenino formado en 2015. Fue en la capital inglesa donde dieron sus primeros shows en calles, avenidas y garitos varios y donde fueron desarrollando su contundente propuesta que no deja ni un segundo de respiro. Lo suyo es el rock guitarrero con ritmos frenéticos riffs de calidad y mucha actitud. Y todo ello con dos miembros sobre las tablas, ¿para qué más?

Cinco jóvenes valencianos se encuentran tras el nombre de Laverge y lo suyo es la rama más poderosa e inquieta del rock alternativo. Inevitable acordarse de unos Queens of Stone Age en sus juegos de guitarra o del desert rock de Truckfighters. Su primer larga duración, editado durante el otoño del pasado 2017 ha recibido inmejorables críticas por parte de la prensa especializada y todos coinciden en alabar su labor en directo por lo que no les quitaremos ojo cuando se suban a las tablas de Bilborock.

50% de rock y otros 50% de electrónica son los ingredientes de Los Invaders. Llegados desde Valencia aunque ellos aseguran venir de Saturno, en su “rock del futuro” cantado en inglés beben tanto del grunge de Seatle como de los Prodigy más fiesteros. Buscan alejarse lo máximo posible del pop e indie más comercial, tirando de bajos oscuros y sintes como protagonistas sobre unas bases tremendamente bailables.

Mama Killa son dos jóvenes músicos de Burdeos a quienes les gusta coquetear tanto con el rock de los 90 como con la electrónica y la psicodelia a la hora de componer sus creaciones. Se han estrenado en este 2018 con un EP que presentarán por vez primera en Bilbao con un directo donde añaden un extra de energía y potencia a su propuesta con la ayuda de tan sólo una guitarra y una batería.

Cuatro jovencísimos curiosos de los sonidos surf, las reminiscencias glam y la actitud garagera. En sus creaciones buscan nuevos sonidos, sumergiéndose entre sintetizadores y melodías llenas de filtros. El chispeante color de sus guitarras y el pop de ensueño que expresa la voz de su frontman, crean una atmósfera trip al más puro estilo Tame Impala que te seduce desde la primera escucha.

Juventud, técnica, virtuosismo y pasión son los principales elementos que se presentan en la propuesta de Purple Vellocet. La banda de Bilbao dice recrearse en el rock psicodélico de los años 60 y 70 obteniendo un más que respetable resultado de post rock principalmente instrumental y carente de voces. Sin contentarse con la homogeneidad, en sus creaciones van uniendo capas donde incluyen multitud de cambios de ritmo o arreglos de saxofón.

Procedentes de Granada, una de las indiscutibles cunas del indie patrio, estos cuatro experimentados músicos que bajo las siglas de RYM dan rienda suelta a sus inquietudes musicales. Temas que se alejan de cualquier etiqueta. La banda se mueve cómoda entre largos pasajes instrumentales que evocan a lo cinematográfico y al post punk más minimalista y misterioso. Una apuesta firme por conseguir un sonido personal a base de crear diferentes ambientes y desarrollos.

Desde Burdeos llegarán también las inquietas melodías de este trío que se hace llamar Wizard. Sus influencias llegan de diferentes fuentes, pero podrían enmarcarse principalmente en las bandas con ritmos más irregulares de la talla de The Mars Volta o cualquiera de los proyectos paralelos de Omar Rodriguez. Math rock, emo de los 90, cada medio minuto de Wizard es un mundo totalmente distinto en los oídos. Ritmos de vértigo sobre unas alocadas guitarras que no se conforman con compases regulares.

Yawners es el proyecto de power pop noventero de dos jovencísimos madrileños. Batería, guitarra y estructuras no demasiado complejas pero tremendamente efectivas y adictivas. Se han ganado ya el respeto de crítica y público de toda España y media Europa gracias a su fórmula mágica para crear hits sin parar. Raro será no ver bailoteos varios entre el público asistente.

Una sugerente voz y piano de corte clásico dirigen las canciones de Yo, Gerard. uno de los proyectos más novedosos de la escena indie pop bilbaína. Canciones que hablan de recuerdos, vivencias y de la misma ciudad que ha visto crecer como músicos a estos viejos conocidos de la escena local que envuelven sus creaciones de unas delicadas melodías que generan emociones, principalmente positivas.